Sobrevaloras la motivación
La motivación.... Esa sensación que todo el mundo busca, que rara vez aparece y que, cuando sientes que estas prácticamente rozándola con la yema de los dedos... se esfuma... y ahí sigues tú, esperando a otro momento de iluminación para decidirte a hacer aquello que te gustaría realizar.
Pero, ¿Que es realmente la motivación y por que la estas sobrevalorando?
La motivación es simplemente una sensación, el impulso que nos lleva a actuar de una determinada manera provocado por un estímulo, ya sea externo o interno. Podríamos decir que la motivación es el paso intermedio de una reacción en cadena:
Estímulo / Inspiración - motivación - acción.
La mayoría de nosotros, cuando queremos realizar algo, esperamos a tener la suficiente motivación para ponernos en marcha y tomar acción. Creemos que sin esa motivación no podemos hacer absolutamente nada.
Esperar a que llegue esa sensación para moverte es una completa perdida de tiempo. Por dos motivos:
- El primero es que si el objetivo es demasiado grande la motivación rara vez aparece.
- El segundo es que la motivación es totalmente efímera e igual de rápido que viene se va. Por lo que no puedes depender de ella para la conseguir lo que te has propuesto.
Pero ¿Y si te digo que no es necesaria? o mejor aun ¿Y si te digo que en lugar de esperarla puedes salir a buscarla?
Volvamos a la reacción en cadena: Estímulo - motivación - acción.
Hemos dado por hecho que la acción es el paso final, pero no realmente no es así. La acción es causa de la motivación pero también es efecto de la misma.
La acción da lugar a más Inspiración, un nuevo estimulo interno o externo que a su vez generará mas motivación. Por lo que podemos deducir que esa reacción en cadena es una reacción cíclica:
Estímulo - motivación - acción - Estimulo - motivación...
Entendiendo esto, solo tenemos que hacer algo tan simple como afrontar nuestro objetivo cambiando la mentalidad y el orden de la cadena de esta manera:
Acción - Estímulo - Motivación
¿Cuantas veces te ha dado una pereza enorme realizar algo, pero lo has empezado a hacer y, sin pensarlo, has puesto a rodar la bola de nieve y el resultado ha sido mucho mejor que el esperado?
Dale las gracias al poder de la Acción.
Cada vez que te sientas atascado en un problema o desmotivado a la hora ponerte en marcha simplemente haz algo. Te hará sentir mejor y ahí encontraras pequeñas píldoras de motivación para seguir caminando hacia tu objetivo.